LA REALIDAD DE UN SUEÑO

...Sospechaba que iba a encontrar algo extraño, la noche era oscura y se aproximaba una tormenta, la casa estaba en total oscuridad, el único ruido que existía era el de las hojas de los árboles las cuales se sacudían por el fuerte viento que había. Abrí la puerta y tan solo escuché a mi gato saliendo a correr, maullaba de desesperación...(Ana María Ospina, grado Décimo).

LA REALIDAD DE UN SUEÑO

Carmela una niña de 8 años, vivía en la ciudad de Londres, era alegre, divertida e imaginativa. Jugaba a soñar e imaginar que viajaba por todo el mundo y que en cada lugar vivía una aventura diferente. 

Un día salió a jugar al jardín de su casa e imaginó que era una pirata que se perdía en el mar y vivía muchas aventuras. Imaginó que se enfrentaba a una ballena gigante que quería destruir el barco y ella lograba vencerla, también empezó una tormenta y su barco se movía de un lado a otro, los truenos eran muy fuertes pero tenía que ser valiente y sujetarse fuertemente a su barco para no caerse, de igual forma logró salir bien de esta situación. 

Su madre la observaba jugar, veía que su barco era una caja de cartón y de la manguera del jardín salía la lluvia de la tormenta, Carmela seguía jugando sin percatarse de la mirada atenta de su mamá, seguía imaginando que llegaba a una isla desierta, exploró el lugar y le llamo la atención una figura en forma de X que cubría parte del suelo, recordó que los piratas ocultaban sus tesoros en lugares marcados con este símbolo, escavó y escavó, hasta que encontró un cofre, lo saco con cuidado lo guardó entre sus cosas para mostrárselo a su mamá, saliendo del jardín para encontrar el camino a la puerta de sus casa se encontró con Sara su vecina, una niña orgullosa, prepotente y caprichosa que se burlaba de la imaginación de Carmela, se percató que llevaba algo y quiso saber de que se trataba, Carmela le contó la historia de su aventura, con una gran carcajada Sara se burló de ella, le arrebató el cofre e intentó huir, sin embargo, la imaginación de Carmela empezó  a funcionar, Sara se convirtió en una bruja horrible que quería quitarle su gran tesoro, Carmela se llenó de valor y recuperó el tesoro de los brazos de la malvada bruja, Carmela volvió a la realidad, miró hacia atrás y vio a su madre la abrazó fuertemente y entregó el cofre, la señora se sorprendió, lo intentó abrir pero fue imposible, trataron de mil formas abrirlo pero no encontraban la forma de hacerlo, pasaron varios días y no hallaban la manera de tener acceso al cofre, Carmela pensó que no debería ser importante, lo observó por úlltima vez y descubrió incrustado en el la llave que lo abría, encontraron joyas hermosas, monedas de oro; su fantasía se había hecho realidad...(Ana María Ospina, grado Décimo).

FUNCIONES

PRESENTACIÓN DEL PROTAGONISTA SU ENTORNO  Y SUS DESEOS	Carmela una niña de 8 años, vivía en la ciudad de Londres, era alegre, divertida e imaginativa. Jugaba a soñar e imaginar que viajaba por todo el mundo y que en cada lugar vivía una aventura diferente.
PRESENTACIÓN DEL ANTAGONISTA	Sara su vecina, una niña orgullosa, prepotente y caprichosa que se burlaba de la imaginación de Carmela.
ENCUENTRO DEL ANTAGONISTA CON EL PROTAGONISTA	Carmela le contó la historia de su aventura, con una gran carcajada Sara se burló de ella.
EL ANTAGONISTA ENCUENTRA EL PUNTO DÉBIL DEL PROTAGONISTA Y LO UTILIZA A SU FAVOR	Le arrebato el cofre e intento huir.
EL PROTAGONISTA SE ENFRENTA EN COMBATE DIRECTO CON EL ANTAGONISTA	Pero Carmela se llenó de valor y recuperó el tesoro de los brazos de la malvada bruja.
EL PROTAGONISTA PARECE PERDER LA BATALLA	La imaginación de Carmela empezó  a funcionar, Sara se convirtió en una bruja horrible que quería quitarle su gran tesoro.
EL PROTAGONISTA RECUPERA LAS FUERZAS Y VENCE AL ANTAGONISTA CON AYUDA DE UN ALIADO	Carmela volvió a la realidad, miró hacia atrás y vio a su madre la abrazó fuertemente y entregó el cofre.
EL PROTAGONISTA CUMPLE SU MISIÓN Y ES RECOMPENSADO	Carmela pensó que no debería ser importante, lo observó por última vez y descubrió incrustado en él la llave que lo abría, encontraron joyas hermosas, monedas de oro; su fantasía se había hecho realidad.

(Ana María Ospina, grado Décimo).